Las rodillas son una articulación que puede sufrir diferentes tipos de patologias, debido a su situación, soporta gran parte de nuestro peso corporal, y su correcto funcionamiento, van a determinar el que seamos más propensos a padecer unas patologias u otras.
Esta vez te vamos a hablar de la Condromalacia, una patalogía bastante más frecuente de lo que quizás puedas pensar.
¿Qué es la Condromalacia rotuliana?
Se origina por un desequilibrio de las fuerzas que ejercen los músculos que intervienen en la articulación de la rodilla, cuando estas tensiones son excesivas, la rótula presenta una desviación lateral la cual provoca el desgaste del cartílago rotuliano por el roce continuo e incluso puede llegar a afectar a los cóndilos femorales por la mala alineación y presión de la rótula.
Es una patología que puede aparecer tanto en adultos, mayores como en jóvenes.
Un poquito de anatomía para entender mejor:
La rótula es un hueso que por su localización podríamos decir que se encuentra “flotando” y sujetada por los músculos del muslo que mueven la rodilla.
En la rotula se insertan los músculos del cuadriceps a través del tendón cuadricipital para después dirigirse hacia la tibia a través del tendón rotuliano.
Cuando estos músculos tiran unos más que otros (por contracturas, deformidades anatómicas, desviaciones en la correcta alineación ósea...) provocan que la rótula no se mantenga en su sitio y se desplace (generalmente hacia fuera) y roce con el fémur (como comentábamos antes este roce puede incluso llegar a erosionar los cóndilos femorales).
Factores que predisponen a padecer Condromalacia:
- Factores ortopédico-genéticos: hablamos de factores ortopédicos que favorecen que la rótula se desplace hacia fuera (mala alineación del pie, rodilla o cadera desde nacimiento) presentes desde el nacimiento o que aparecen con el desarrollo.
- Factores adquiridos: como hemos comentado anteriormente generalmente en casos de Condromalacia encontramos desequilibrios musculares. Lo que pocas veces se detiene el médico e incluso el fisioterapeuta es a observar por qué se producen esos desequilibrios. A veces se deben a una alteración a nivel de la cadena víscero-somática que ocasiona la aparición de tensiones en cadenas musculares que terminan haciendo que unos músculos tiren más que otros.
Evolución de la Condromalacia rotuliana:
- Grado 1: Dolor leve, por reblandecimiento del cartílago, que suele presentarse por alguna posición, o ejercicio, el calzado, o cambios climáticos
- Grado 2: Dolor más intenso, por una pequeña fibrilación del cartílago que perdura con el tiempo, y es posible visualizar el desgaste a través de la resonancia magnética
- Grado 3: La superficie del cartílago está fisurada llegando a las capas profundas del cartílago y viene acompañado de inflamación intensa.
- Grado 4: Pérdida del cartílago articular, dolor incapacitante y permanente de la articulación, acompañado de inflamación, e inestabilidad articular.
Tratamiento de la Condromalacia rotuliana:
Una vez que el médico descarta que el problema no es ortopédico-genético y por tanto no es conveniente el tratamiento quirúrgico , el fisioterapeuta deberá tratar esas descompensaciones musculares a base de estiramientos, vendajes, potenciación del vasto interno del cuádriceps, pero en muchísimas ocasiones cuando no ha habido traumatismo previo será conveniente investigar y tratar la disfunción orgánica que ha provocado esa descompensación muscular, es decir buscar la cadena víscero-somática que está provocando que esa descompensación muscular se haya producido.
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